Sierdi

MAS ALLÁ DE LA PASIÓN

 

La vi venir, hacia mí, tan hermosa en mi versar.

Estaba seguro, que ella no venía a conversar.

Al ver su silueta, en contraluz, con el foco del baño,

Conocí, un milagro de la naturaleza, de cada mil años.

 

Venciendo, cualquier belleza terrenal.

Me compartió, su ternura fraternal.

 

Hoy, no miraré la luna, fuera de mi ventana,

Porque esta noche, la luna me visitó, en mi cama.

 

Sin límite, me pedían mil caricias, sus ávidos ojos,

Pero el nerviosismo, me despojó de mi gran arrojo.

 

Ella suavemente, tomó mi trémula mano…

Mientras, su pecho con mi pecho, arriba.

Meneos, de arriba, abajo… de abajo, arriba…

Sacudidas de felicidad, su vientre, más cercano.

 

Fue cuando, sentí mis dedos despertar.

Cada uno, quería tomar, dirección diferente.

Mis manos, perdieron la conciencia de repente.

En un coctel vivo. imposible de imaginar.

 

Sus senos, tan duros, como dos volcanes,

En ellos, se alojaban, dos piedras preciosísimas,

forradas en el más suave terciopelo.

 

Subí hasta su sedoso y perfumado cabello,

Mis tiernas manos, se deslizaron, hasta su ombligo.

Como dos resortes, vi mis manos, envueltas en sus piernas.

Con su sonrisa tierna, ella me pidió entrar, en su intimidad.

Me invitó a pasar, y a sumergirme…

En su diáfano, estrecho estanque.

 

Ceñido a sus paredes,

Escuchaba su femenina voz…

Decir, tiernamente, te amo…

Un millón de veces, te amo...

 

Al abrir los ojos...

El entrometido sol, dio por terminado,

El idilio de amor, más bello de mi vida.

 

La vida continua…

…Y nuestro devaneo,

Festejará, hasta el fin de nuestros días.