Solo un idiota sin más
MAÑANA SOÑAREMOS
En esta noche de lluvia
fragores ensordecen
la sutil lexía del espíritu
y el tiempo-espacio se tambalean.
Las vehemencias se enajenan;
el cristal de la sustantividad se rompe,
la mano del destino:
pinta este efigie lóbrego y majestuoso.
El sol duerme y despierta
y en su introspección:
las enseñanzas herméticas de este kybalion
van creando universos semejantes...
Y una cordial sonrisa se va alejando
tal cual serafín que vuela en su razón.
La melodía envuelve el tris:
mi existencia sus escalas y notas
que escritas en los pentagramas del alma:
resuenan en el corazón.
Crepúsculo que perece en la alborada:
entre literatura gótica y danzante
el fulgor apasionado clarifica las penumbras
mientras la poesía valsa al son de un lozano día.
Olimpos y hades de ataraxia:
luces y oscuridades,
materia y esencia;
norma de opuestos
crean la conciencia histórica,
En amalgama de tiernos ósculos de voluntad.
Mañana soñaremos
vestidos de naturaleza.
Intentando hechizarnos con surrealismos
resucitado pasiones voluptuosas;
en donde el acervo, y el detrimento no se manifiesten.
Sin hesitación:
Mañana soñaremos.