Haz Ámbar

Salvándonos de la salvación

Bebo directamente de ese vapor que los pulmones corroe, 

ahogándose retrocede para rearmarse y resurgir colmado en odio,

y, como evidencias opacas de aquel tieso telón, formar arroyos

que en sus aguas desmitificadoras sedimentan al incauto pasajero

dotándolo de brevedad. 

 

Enteros palacios desplomándose pueblan la sombra fingida, 

y, una tras otra atenuándose, desfallecen las velas del candelabro, 

mientras los cuervos acechan a la imperial lechuza

cuyo trono se desparrama bajo la lluvia, 

y la peste es centinela serpenteando sobre los campos, 

esterilizándolos con sus ácidos 

 

Un promontorio en la llanura permite divisar a las crías indomables, 

como se van agrietando hasta fundirse desfragmentadas entre arena y penumbra, 

amordazadas por su llanto, que póstumamente brotará de la tierra muerta

tanteando a ciegas la salvación; obteniendo sólo ausencia

taciturna y preservada en presente.