Tengo sueño…
un sueño intenso…
que se hace incontenible,
que somete a mis sentidos
y convence a dimitir a mis latidos.
Que arremete con desidia.
Un deseo de dormir profundamente…
muy largamente…
estirado en la serena placidez de este silencio,
atrapado en el sosiego que me envuelve.
rumbo a un viaje a lo insondable,
con pasaje hacia la nada…
a alojarme en la quietud de lo profundo.
La intención de hacer un alto,
descansar de esta espera que no llega.
Unas ganas ya sin ganas…
y mis fuerzas ya sin fuerzas.
Busco paz…
ha muerto el ciclo,
no se pudo con la angustia acumulada,
la impotencia derramada.
La rutina fue copando los momentos,
la canción que se repite…ha rozado la impaciencia,
va apagándose el camino…se evaporan los intentos.
Me vestí del color de este cansancio,
disfrace mi dolor de amor farsante,
me mentí que estoy contento…
estrenando una sonrisa congelada,
y la mirada extraviada en lo lejano.
Mi pasión decepcionada se resigna.
Esa paz sepulcral que engaña calma…
toca fondo y me conforma,
esa luz titubeante enfría el alma…
va encendiendo este dilema que perturba …
que trastorna.