A veces estoy triste, tan triste como hoy
y retorno a esa tierra lejana, donde soy tan feliz,
en las alas de un ave, en mi blanco velero,
en un verso sencillo llego a puerto.
Ser feliz es abrir mi cuaderno de versos, una página cada mañana,
de ella sale el sol bañándome de luz
y mariposas de colores revolotean en mi alma
magia, donde la ilusión es un regalo de palabras.
Vivir es la esperanza de ser y estar,
es un tiempo que se niega a morir
y aunque quiere marchar, no le dejo partir.
Lejano divagar del alma junto a ti,
no hay error en su rumbo, es solo amor, amar
no existe un segundo sin querer o esperar; solo así.
Vive en mi aliento en cada amanecer,
se sostiene y sobrevive al tiempo
inalterable, eterno,
en vano despedidas y cálidos regresos.
A veces estoy triste, tan triste como hoy
y tu mano acaricia mis cabellos
rozándome tus labios en un beso, suave, tierno
naufragando en tus ojos de esmeralda y de mar.
Y me declaro tierra donde penetra más y más la raíz,
que alimenta la esencia de este raro jardín,
a veces solo así, me sueño junto a ti, ganándome el deseo
y me abrazo a tu abrazo, y soy casi feliz.