Tú la tierra que me vio NACER
hoy despide mi cuerpo a otra tierra, otro espacio
otro vacío inconcluso por llenar.
Tú, tierra de mi primer aliento
barro y cenizas
la mirada de madre
la noche ya vacía
déjame caer en la pupila de tu abrigo
hazme sincera la estrofa que hoy entono
hazme duna silvestre y salvaje
para volar en libertad
como los pájaros sin cadenas
que no se atan, ni se quedan
a esclavizarse por un efímero sentimiento.