Vivo rondando tu casa,
sigo buscando tu amor,
eres causa de esta pasión
que se incrementa cual llama;
esta obsesión no se calma,
para siempre se quedó,
como una ansiedad feroz
convertida en esperanza;
busco, acaso, una señal
de ese supremo placer
que si me puedes amar;
una mirada, mi bien,
una risa o un suspirar
un simple roce de piel;
cualquier detalle será
agua que calma mi sed...