Es magnifico, estas lejos pero te siento junto a mi, tu alma me acompañó toda la vida y lo sé, porque ahora que conozco cada parte de ti, cada virtud, cada defecto, cada sentimiento, siempre te sentí en las oscuras noches iluminadas solamente por las luces de los rayos cayendo, donde el silencio solo desaparecía por el ruido de la lluvia. Eso era yo, una fuerte tormenta, golpeandome contra el frío suelo, abrazandome mientras formaba pequeños charcos alrededor de mi rostro. Ahora todo cambió, no sabía de tu existencia pero de alguna manera estuviste siempre a mi lado, sentía tu mano acariciar mi rostro, sentía que secabas mi lagrimas, se que tu espíritu salvó mi vida para que meses después pueda conocerte. Querido, somos como dos flores que florecen juntas, somos dos aves que vuelan simultáneamente, somos dos hojas de otoño, el viento nos lleva hacia nuestro destino. ¿Qué destino será? No lo sé, pero si permanecemos juntos, sin duda alguna puedo decir que será increíble. Tendría que dejar un final escrito aquí, pero en mi mente no hay un final para nosotros, así que no lo haré, jamás. Te disfrutare en esta vida y te esperare en el más allá.