Gira la rosa en torno a su vacío,
como un intenso palpitar...
herido en su fragancia,
y la rosa desnudada de toda espina
se muestra dadivosa...
en la patria desasida y sin amada.
¡Oh joven amante,
que te abres al mundo...
cerrando tu corazón a la esperanza,
cuánto de tu atormentado espíritu
desvela la existencia...
de una noche sin mañana!