En los eternos palacios de mi memoria, solo existen tus recuerdos.
En el torrente que pasa por mi corazón, navegan mis sentimientos.
En cada poro de mi cuerpo, está el humor y el deseo por el tuyo.
En las yemas de mis dedos, solo existen los recorridos por tu piel.
Cada respiro de placer a mi lado, lo guardo en mi memoria.
Cada lágrima que has derramado, está torturando mi alma.
Cada sonrisa que me ofrecías, me sigue llenando mi espíritu.
Cada vez que me dabas tu amor, se ha incrustado en mi corazón.
Te siento en mis lágrimas, que se derraman por no tenerte.
Te siento en mi mente, cuando escribo cada verso.
Te siento en todas partes, pues te quiero siempre a mi lado.
Te siento en mi gusto y olfato, pues estoy impregnado de ti.
G3