y aquí me encuentro después de un día malsano
entre recuerdos de un pasado triste que sin piedad amenaza mi presente
queriendo que la amargura de antaño escasee
que mi dudosa perseverancia fuese libre
que mis ojos brillaran tras cascadas saladas
que mi alma lograra desahogarse
y mis alas emprendieran el vuelo sin miedo
que mi voluntad fuese eterna
y mi corazón invulnerable
y mi paciencia impenetrable un ruido
mi caminar sin remordimientos
y mi más fiel espíritu despierto
quisiera gritar tras la mordaza
y bailar desnuda sin cordura
y ser yo por hoy y mañana
y olvidar a quien el ayer hizo
del más silente sonido un grito desesperado.