La ternura viene envuelta
Entre la dulzura de un beso
Nació un día en que las horas
Se congregaron para aliviar sus días.
Ecuación infinita del tiempo
Incalculables cuitas del amor
Respira la belleza de su encanto
Acariciando la esperanza de la vida.
Los anhelos dormitan en silencio
Están en un lecho sin distancias
Tocan cada melodía del alma
Son ojos curiosos del horizonte.
Humanidad amante de lo posible
Crepúsculo y sombra del misterio
Termodinámica ancestral de su grano
Serenidad viviente del afecto.
Alegres ojos amamantados de luz
La lucidez no tiene espacio
No hay materia en su brisa
Es el espíritu en su rato más tierno.
EH