Claudio Batisti

Amor fecundo (soneto)

 

 

Pon en mi lecho cuando esté dormido,

una corona de inmortales besos,

un concierto de pájaros traviesos,

y de rosas mi féretro vestido.

 

Cuando mis pensamientos se hayan ido,

y en un collar de estrellas queden presos,

rememoren aquel que con excesos

supo gozar de todo lo vivido.

 

Que suene música y se esparzan flores,

y tú no guardes luto ni me llores,

la vida se termina en un segundo.

 

Mantén en tu semblante toda calma,

porque en lo más profundo de mi alma

queda solo tu luz y amor fecundo.

 

Claudio Batisti