Te espera mi amor,
te esperan mis besos,
el día y sus horas
y la humedad del lecho.
Te espera la tarde,
vestida de sueños,
la noche desnuda
y el abrazo ciego.
Te espera la vida
tan lejos del cielo,
con suspiro y caricias
que encierran el fuego.
Te espera la lluvia
de todos los eneros
y la niebla de siempre
que esconde el sendero.
Te esperan abriles,
desnudos de tiempo,
que encierran miradas
con flores y versos.