Tienes un toque suave
que despierta las ganas
de querer ser un ave
y volar alto… sin más.
Aroma de agave,
en el alma llevas
mi corazón enclave
que desvanece dudas
en dulce canto de amor,
enjugando mis penas;
bañándome de fulgor.
Vamos por las veredas,
ataviados de color,
a nuevas odiseas.