En un mundo serpeante y grandilocuente,
cada vez más grande y elocuente,
el que no participa, en la foto no sale,
no pertenece a la sociedad ni a la oculta entente.
La hipocresía en la Navidad,
el consumismo exarcebado, innecesario y desmedido,
que enmaraña la autenticidad de una fiesta religiosa mutada en una pagana.
Las películas americanas que fomentan durante dos semanas la falsedad,
la bondad no es temporal ni mediática,
es continua, atemporal, esencial y única.
La hipocresía de la maldita pandemia,
el primer mundo hasta arriba de vacuna,
el tercer mundo hasta arriba de pena,
la globalización es la quimera de la miseria.
La hipocresía del dualismo ,
terminó merecidamente económico,
cada vez hay más ricos y muchísimos más.. pobres,
el fin de la clase media sufridora, meritoria y trabajadora .
Y por último, pero no por ello menos crucial,
la oligarquía de los nuevos oligarcas,
los actuales políticos, casi todos, se creen del Santo Grial,
cuando realmente solo creen en ellos mismos, y los demás.., a ellos, que más les da..🤔