Despojados, inclementes
Llevados hasta el último reducto
No somos los que caminan por si acaso
El sol ha taladrado cómo pesadilla a flor de piel
Los ojos cada día distinguen menos nuestras sombras
Y la noche calla, pero no otorga
Es la primera vez que esta tragedia
Que se cierne cómo tempestad
Y despeja el tiempo y las estrellas
Socava hasta el fondo de las almas
Dónde cada nombre es una tumba
Y cada día un nuevo encierro
Perpetua la soledad cómo destino
Dibuja el olvido en un balde de memoria
Con todo y telarañas, está bien
Acostumbrados a perdernos, y vendernos
Hicimos de este llanto una canción
Un misterio, que todos guardan
Un letargo, un cementerio, la catástrofe
Algo del que fuimos y hoy no somos
Nos salvamos dónde se congelan las mañanas
Entre este universo muerto y lo perdido
Resolvimos perdernos entre todos
Entre todo lo que es aire
Entre todo lo que era mar
Entre el cielo y su reflejo
Y entre los miedos que nos susurran
Resolvimos olvidarnos
Despojados, inclementes
Lo que ayer quemaron, aún no es ceniza