Oscar Perdomo Marín
ADIOS
¡Adiós a la miseria repetida!
La pobreza es un eterno adiós,
que huele a muerte.
El humano derecho de comer
tiene alas de cuervo ,
comiéndose así mismo a falta de carroña.
Adiós, quiero decir:
¡Que acabe para siempre el desamparo
y un plato de lentejas nunca sea
moneda de ignominia.
Adiós a la negrura del avaro
y bienvenida siempre la semilla,
germinando de manos
del hombre de la tierra que no olvida,
que de ella venimos y nos da de comer
con el trabajo.
¿Y qué puedo decir en esta hora?
¡Regrese el pan caliente de los hornos del tiempo!
el sueño de un poeta repartido
en mil pieles de siglos
desde que el homo sapiens aturdido,
abandonó la cueva.
¡Adiós quiere decir que no hay comienzo
cuando todo termina!