Mis ojos son solo sombras sin esperanza,
ya mi vida conoce cada desaire, cada traición,
he bebido tanto que ya el vino no sabe a nada
y me he desangrado agónicamente el corazón.
La existencia me transcurre en el alivio de dormir
con la pesadilla de triste volver a despertar,
soy aquel náufrago que está en la tierra
pero se siente solo y ahogado en la mar.
Exiliado de todo amor y pasión que existe
mis carnes tiemblan con solo el recordar,
mi vida es un pozo de oscuros dolores
que ningún alivio ha permitido curar.
Siento a diario que soy del Hades una sombra más
Que mustio y hastiado vaga por el reino de los vivos
para sus dichas y sus lamentos profundamente envidiar.