Luis Rayo

ETERNIDAD

El hombre piensa lo que tiene que pensar, no lo que quiere pensar.

Dice lo que tiene que expresar, no lo que quisiera decir.

Hace lo que tiene que hacer, no lo que le gustaría realizar.

Se encuentra con quien se tiene que encontrar,

no con quien le gustaría encontrarse.

Se aleja de quien se tiene que distanciar,

no con quien se debe de apartar.

Y así por toda una eternidad.

¿Será la Eternidad lo que marca el destino?

No lo sé, pero ahora sé que lo que pienso

es lo que tengo que decirles.