Amor mío:
hacerte unas plegarias quiero;
mas, como en prosa no soy bueno,
te dejo mi verso sincero.
Estos días a tu lado
he sentido el amor verdadero,
por eso, te pido primero,
no me dejes olvidado.
Tus masculinos brazos
me dan seguridad y abrigo;
no me niegues tus abrazos
como segundo te suplico.
Besar tus suaves labios
me hace entrar en limerencia;
no me niegues el sentirlos,
te pido con vehemencia.
Tus tiernas caricias
me hacen flotar entre
nubes de placer,
por eso, te requiero con prisa,
que el amor no me dejes de hacer.