Mauro Enrique Lopez Z.

Me fui a navegar

Me fui a navegar, pero pensaba

que te iba a extrañar, y llevar esa pena

porque te fuiste de mi lado; lo bonito 

fué que en mi trabajo, ni pensaba 

ni estabas en mis pensamientos;

hasta por las noches dormía 

plácidamente, no tuviste en mis 

sueños. Que grandioso es Dios, al regresar 

a casa no estabas. Que linda es mi vida, hoy espero no regreses, porque siempre vienes 

arrepentida a que te perdone, y quiero 

que, esta vez sea para siempre; buena 

suerte porque yo estoy felíz sin ti,

 y de extrañar tu presencia, ni para

escribirte versos de pena.