De sobra sabes Sabina
que contigo no he de casarme
pues tú mismo ya lo decías
ser peor marido y mejor amante
No se lo qué Jimena diría
que tan bien te conoce, tunante
pues son ya más de 19 días
los que en sus brazos aparcaste
Tras el turbio cristal del acuario
de tus peces de ciudad
te escuché aprendiendo a soñar
y te guardé para mí cual relicario
Aprendí a vivir amando
a este mago de palabras
de la poesía y el descaro
y de los corazones en brasas
Por la magia de las notas
que derrocha tu bombín
tu público bien que te adora
aunque les robes el mes de abril
Por mucho ruido que metan
los que renuncian de ti
te salvaremos, poeta
del hombre del traje gris
Son tus canciones canallas
Y sin embargo... hermosas
a algunas les sobran agallas
a otras el vinagre y las rosas
Perdone señor Martínez
mi abuso de confianza
hágame un par de mohines
y siga arañándome el alma