Vas cultivando mi amor,
cada día con tus versos,
como si fueran tus besos,
todos llenos de calor.
Alimentas la ilusión,
en mi alma inapetente,
voy queriéndote inconsciente,
pero queriéndote voy.
Hoy mis versos florecieron,
porque con versos plantaste,
una luz que alta se abre,
junto con aquel lucero.
De noche mirando al cielo,
converso con las estrellas,
le pido que alguna de ellas,
me acompañe en mi desvelo.
La Luna sonríe irónica,
porque no me cree sincera,
quiere saber mi quimera,
porque siempre estoy muy sola.
Es que yo soy soñadora,
y necesito de tus versos,
nadie entiende que aún dispersos,
son los que llenan mi aurora.