La noche, llora a cántaros a veces,
como señora que se ahoga en negro luto,
y yo en silencio…no me inmuto, bien la escucho,
aunque su duelo no es mi duelo en absoluto...
Y luego, impone gritos a mi insomnio,
como si fueran ecos largos del silencio,
los que pierdo y los que ahogo entre mi puño,
aunque me insista con sus grillos y sus perros.
La noche baila sola algunas veces,
con su música lejana, adormecida,
y la luna, cuando llega y la visita,
se mantiene tras su nube, pensativa;
después, se oculta, cual amante disoluto,
escamoteando su blancura introvertida
y dejando nuevamente, así vestida,
a la noche, con su llanto… con su luto.
Derechos Reservados de Autor ® Rafael Rendón Contreras Safecreative.org
Código de registro 2007124723158 Fecha de registro 12-jul-2020 2:55 UTC