Por cuidar mi corazón
no me quise enamorar
tratando asi de evitar
el puñal de la traición.
Sin motivo ni razón
el amor dejé pasar;
por cuidar mi corazón
no me quise enamorar.
Me ofrecieron gran pasión
que me hacía suspirar,
pero por miedo a llorar
dije adios a la ilusión,
¡por cuidar mi corazón!
Autor: Aníbal Rodríguez.