Tengo un sueño a despertar,
promesa en duermevela,
presagio de auroras y laureles,
talismán de grafos sagrados,
una esperanza inmarcesible.
Me habita desde la infancia
esta certeza del porvenir,
como horizonte desbordado
en el intersticio del cielo y la mar.
Hay más tesoros en mi corazón
que plata y oro en Arabia
y soy multimillonario de versos
en un mundo repleto de poetas,
en el sueño que no dejo de soñar.
Alexander Elías2022