Poeta, tú no sabes cuántas veces
reí, lloré y sufrí con tus poemas.
Solía yo encontrar
fragmentos de mi vida entre tus letras.
Pero en algún momento…
tus frases, que eran mías, sentí ajenas.
¿Acaso fueron celos?
No tengo la certeza.
Quizás son los culpables
los pájaros que habitan mi cabeza.
Entonces me alejé
siguiendo la ilusión de ser poeta...
Hurgando en los escombros de mi vida,
le hallé motivos a mi pluma inquieta.
También canté al amor...
Grité a todo pulmón mis incoherencias.
Saqué de mis entrañas
todo aquello que duele y que atormenta.
Y confesé en mis versos
de mis noches de insomnio y mis rabietas.
De lágrimas ocultas en la lluvia,
de sábanas desiertas…
De que en el lado oscuro de la luna
escondo mis tristezas.
Y no fue suficiente...
Hay algo que les falta a mis poemas...
Y es que, no tienen magia...
los miran una vez y no regresan.
¿Tú, sabes la razón?
Respóndeme Poeta...
Dime... ¿Alguna vez te dió temor
a que fueran efímeras tus letras?
¿A dónde irán mis versos?
¿Y a dónde mi ilusión de ser poeta?
Responde por favor...
¿Tienes una respuesta?