Estoy aquí... sola
con mis ojos puestos
en la inmesidad ... de la nada...
Estoy aquí, divagando en la locura
de poder encontrar una razón...
un pensamiento,
que me imponga de nuevo
aunque solo sea por un instante...
la templanza de ser ... yo.
De rescatar del espacio infinito
que ha marchado
la inalcanzable razón...de la cordura.
veo los claustros oscuros
de la mente...
me envuelven...
me arrastran hacia mundos lejanos
de fantasmas solitarios
de duendes opacos y grotescos...
y tengo miedo...
Miedo de perderme
en el laberinto oscuro de la mente
donde el desatino, oprime
brotando silencios ... y martirios ...
dejando dominios en el alma
luchando incansable en la nostalgia.
Sembrando en el espacio esteril
de la sensacion de ser...
de ser... de ser el margen de la espera...
de ser el margen de la vida.
y regresar...
quizas humilde al instante del ayer
donde la magia, latente me cubria,
donde la sensacion estaba viva...
donde los sueños despojaban al dolor.
donde estaba esperando la ilusion.
donde subir al altar de lo perfecto
era el fiel designio de mi alma.
donde esperaba entrelazar
a la clara dulzura con la paz.
donde se fundian conjugandose en silencio
la belleza... el amor ... y el corazón.
regresar...
Donde los pensamientos derramaban sensacion
de delirio, mezclado con la risa
envueltos en la luz, de la esperanza.
De una imagen, que sutil resplandeciera
desandando la suavidad de una mirada.
De descubrir con los ojos, aun cerrados
los petalos de una rosa... sin nacer...
de una luna oculta tras el horizonte...
de una estrella, detras de las tinieblas...
estoy aqui... sola
con mis ojos cansados y gastados
con el castigo... de ser yo...
aun divagando en la locura
Navegando en silencio... y el espacio.
delirando en el camino tempestuoso
del gran misterio...
¡ DE QUERER ATRAPAR ... A LA CORDURA!.
María Inés Pascuccio.