Aún te extraño, vida mía,
aún pervive el gran amor,
el fuego de esa pasión
que dejaste tú encendida;
aún tu recuerdo ilumina,
tu sonrisa es como un sol,
la ternura que dejó
ese aliento que eterniza;
vuelve a darme tu cariño,
a llenarme de placer,
nunca me eches al olvido
ven a renovar mi piel,
torna mis diarios suspiros
en dulce y cálido Edén...