Siempre estoy pensando en ti,
mi auténtico fundamento,
raíz de mi sentimiento,
luz en que me consumí;
si triunfé o si me caí,
tú marcaste todo momento,
cualquier acontecimiento
nunca lo hice para mí;
siempre escuché tu llamado,
me moví por la locura
de ese atrevido inspirado
que al expresar su ternura
o al estar decepcionado:
todo es divina aventura...