Siempre di todo
Lo que tenía y más
Si me pedían amor
Daba amor a manos llenas
Si querían sonrisas
Las regalaba por miles
Siempre estaba mi corazón
Abierto para amar
Y mis brazos eran
Una extensión de mi alma
Entonces me pregunto...
¿En qué momento
Cambió todo?
¿Cuándo fue que mi mundo
De bondad y sueños
Se vino abajo?
Solo sé
Que un día amé
Con toda el alma
Y no me amaron
Y que un día regalé
Mi última sonrisa
Y abracé también
Por última vez
A quien logró después
Romperme el corazón
Y entonces aprendí
A golpes de soledad
Que el amor no se regala
Ni las sonrisas
Ni los abrazos
Y que hay que ganarse
El sublime derecho
De recibir y dar amor .
Y entonces
Comencé a buscar
Lugares secretos en mi corazón
Para guardar
Todo el amor
Que nunca pude dar
Y por eso ahora
Cuando me piden amor
Lo doy sí
Pero en forma de lluvia
Como quien riega una flor
Y teme que muera
Por exceso de agua
Como los rayos del sol
Que van apareciendo con timidez
Después del invierno
O como el perdón
Que se va ganando
Poco a poco
Sin causar más heridas
Y aprendí
A dar sonrisas nuevas
A quien no puede soportar
Una tristeza más
Y a abrazar fuerte
A quien no resiste más la frialdad
Del corazón amado
Y amparo otras soledades
Y consuelo otras tristezas
Porque sé que aún
Hay mucho en mí
De sueños y felicidad
De besos y de amor
Solo que se esconden
Por miedo a vivir
Solo que no quieren
Volver a sufrir
Y a pasar...
Por ese mismo camino
Que conoce tan bien mi alma
Llamado dolor, traición y soledad !
Ana María Indacochea Garreta Seudónimo: Socorro Andrea