FELINA

POR SIMPLE ORGULLO PERDI TU CORAZON

Hoy viene a mi recuerdo aquel día

 

en el cúal yo destrocé tú corazón,

 

déjame decirte...lo lamento,

 

muy tarde comprendí que te quería,

 

si yo te amaba...no te miento,

 

te adoraba con todo mi candor.

 

Quise remediarlo, no lo niego,

 

mi alma gritaba, pídele perdón,

 

mis labios musitaban

 

palabras no tengo,

 

por simple orgullo

 

perdí tu corazón,

 

pues pude decirte

 

a pedir perdón yo vengo,

 

pero mi orgullo

 

pudo más que la razón.

 

Pero al caer la tarde

 

de aquel día,

 

cuando tu pecho

 

suavemente acariciaba,

 

sentí una gran emoción

 

al contemplarte,

 

pero de tú amor

 

ya nada me quedaba,

 

sentí una grán nostalgia de dejarte,

 

tristemente comprendí

 

que no me amabas.

 

Se quedó tú silencio prisionero,

 

viviendo en cada ser

 

y en cada cosa

 

que mis ojos vieron,

 

los recuerdos de tu amor

 

 que me quedaban,

 

los que con tanto esmero

 

guardaba aquí en mi alma,

 

como carbón encendido

 

me quemaban.

 

Ya no recibí más

 

la luz de tú mirada,

 

sólo con tristeza yo observaba,

 

cómo el cáliz de mi rosa

 

se marchitaba.

 

Felina