Eran las diez
de un otoño sin sabores
abracé la nada en soledad
y comprendí que ya no estabas.
Pero mi río viene aún
por este valle desierto
caudal de versos sentidos
a tu ternura mi amor.
Quiero saberte de memoria
un siglo cada hora
y en mi alma,
el mapa entero de tu piel.
Que no se escape el tiempo,
la vida…
misterio de este amor que no termina
aunque lo quiera sofocar.
Crepitan de locura
leños de mi soledad
meciendo con nostalgia
a niños que ya no vendrán.
Quiero saberte de memoria
mujer,
cada día recorrer
el mapa entero de tu piel.
Vivo feliz, de recuerdos,
vida triste
en que añoro
de tus sonrisas esa luz.
Era yo tu poeta, princesa,
sombras de color
y lágrimas marchitas
para regar aquella flor.
Quiero saberte de memoria
…quería…
un siglo cada hora
…con vos…
tu mapa aquí en mi alma
tu piel y tu sonrisa…
No sé por qué me duele
así este amor..