Mauro Enrique Lopez Z.

Llore como un niño

Te lloré como un niño, cuando 
me abandonaste, que triste fue ese día,
pero mi Dios bendito, me dió sabiduría 
para arrancarte de mi dolido corazón.
Hoy río, canto,  hasta me inspiro 
en versos de amor;  para tí 
ni para de traición. Que bonito 
es vivir lejos de ti, y de lo extraño 
es que mi olvido siempre estará 
para vos, por tu abandono mujer.