Hay veces que parece tan complicado, algo tan sencillo, como es el amar.
Dos que se aman; son amantes por definición, aunque parezca una palabra peyorativa
Tú me amas y yo te amo. Tú me salvaste y rescataste de la soledad. Yo te salve del divorcio
Y te rescate del naufragio. Aunque eras prohibida para muchos, fuiste mi recompensa,
Los que no aman con el corazón, dan una connotación errónea al amor y hacen ofensiva ser amantes. Tú me gustaste desde siempre y aun sabiendo que tenías pareja, yo también te gustaba. Te agradaba. Grandes charlas, café amargo, pan sin levadura e infelicidades en tu matrimonio. Y apareció de la nada, Aquella oportunidad que esperaba.
Tú a los 17, te embarcaste en un proyecto de vida, con atención de princesa, compromiso mutuo. Compañía permanente en casa, besos, flores y cenas después del trabajo. Sorpresas en la cama y dulces formas de ver la luna. Recibir el sol en la playa o el corredor de los sueños que día a día alimentaban. Normalizaron un estilo de vida, descuidaron el amor y la felicidad se hizo concepto, frío y teórico. Te encontré con el corazón abandonado.
Aquella barca de juventud se convirtió en una gran nave, bella y funcional por fuera, pero estaba haciendo agua, se estaba viniendo a pique. Fueron días difíciles para ti, ver destruida tu obra de años, familia, amigos, prestigio, proyectos, pareja y las ganas terribles de botar todo y empezar de nuevo como hace cuarenta años.
Sentir en los labios el amor, verlo corre por todo su cuerpo, tenerlo siempre en esa parte del pensamiento. Volver a os 17 como dice aquella canción, le recorría el pensamiento, habitaba en sus sueños y daba un calor suave a su piel, cada vez que la noche tocaba su escote y sobre todo cuando aquella mirada buscaba refugio, como golondrina extraviada.
Todas esas complejidades del amor se leen diferentes desde un corazón enamorado, desde una paciente espera. Entrar en esa parte de tu vida, fue como condimentar la cena principal de esa noche. Poner una sonrisa clandestina en tu corazón, que asomaba por tus labios y da consistencia a tu vestir y estabilidad, a tu matrimonio. Que se salvó, cuando revalorizamos la palabra amantes y le dimos brillo nuevo, sin trastocar tu matrimonio
Disté a mi vida, las alegrías que no encontraba y proveí a tus noches, de la luz que apago tus oscuridades. En el jardín de tu vida volvió a brotar el deseo, la pasión. Es divertido entretener la tarde para que no se haga noche, jugar con tu pelo, jugar a las escondidas con tus preocupaciones de hogar. Dibujar en el aire un signo de felicidad, que llevaras puesto cuando vuelvas a tu estabilidad, a tu simulacro de dama de sociedad.
Viéndolo bien, el amor es más simple. Dos personas se ven, se tratan, se gustan, se empatan y sí, cada uno abre las puertas a esa relación, es porque requiere que le provean lo que su relación en crisis no le está dando. Entonces es cuando surge esta variante, sin posesiones, ni promesas eternas. Ni ella quiere destruir su familia, no abandonar su mundo, ni el otro quiere dejar su soledad y es entonces cuando se aman, como lo hacen los amantes.
LENNOX
EL QUETZAL EN VUELO