Gonvedo

\\\\\\\"BREVERÍAS\\\\\\\"

I.

Antes de que tú fueras

luz de tu color primero,

o pulmón bastante para el llanto,

incluso antes de que el roce de tus manos

curase mis noches encendidas en alfileres,

yo no era sino el sueño roto

de la raíz que vive sin demora

en cada flor que retoña,

la blindada osamenta, oxidada a veces,

de mis anónimas muertes de septiembre.

 

II.

Es la sombra la luz de tanto olvido.

Tiene la ausencia el inalterable

color de la desesperación.

Y yo quise crecer en tu recuerdo

de sol a sol y al descubierto,

hambriento y en silencio,

mirando sin herir,

pero, sin embargo, tú no estabas allí,

ni en ningún otro lugar.

Eras soledad o nada.

 

III.

Donde la luz declina

y las piedras ruedan

apenas queda una huella,

apenas el recuerdo ido de su paso,

quizá el oneroso silencio

de la noche recobrada.

Así, en los ensombrecidos ojos

demora la memoria su mirada.

 

IV.

Abrí mis ojos

y Dios estaba ausente.

En mi costado caía la noche más oscura.

Mi sangre iba y venía con continuado eco,

y en la fluvial arteria volaba mi corazón en trémolo.

Vinieron las sombras a mi encuentro,

me recordaron la dignidad de mi luto

extraño como soy en esta piel que amo.

 

 

\"Pájaros de niebla\"   (2022)