Tus labios parecen fresas
pero yo no quiero verlos
y besarlos es muy poco
lo que deseo es morderlos.
Cuando tus ojos me miran
yo siento un gran temor,
de penetrar por tus ojos
para inundarte de amor.
Tu cara es muy bonita
con una piel muy lozana
y nada tiene que envidiar
a una flor de la sabana.
Tu pelo es muy frondoso
y brilla con gran esplendor,
cuando recibe las caricias
de los rayos del rey sol.
Tu piel delicada y suave
es una gran tentación,
para acariciarla toda
con mágica seducción.
Eres muy bella y atractiva
con una sensual atracción,
que despierta mis deseos
acelerando mi corazón.
Cuando estés a mi lado
no sientas ningún temor,
mis deseos son muy puros
porque son deseos de amor.
Autor: Alejandro Díaz Quero
Villa de Cura,28/01/2022.