Hoy caminando por una calle vacía
recuerdo la agonía que en su momento me vencía,
hoy noche despejada
el destino se rie a carcajadas
y en mi mente una gran encrucijada,
el corazón me reclama
lo que por noches confecé a mi cama.
Hoy con el alma atenta
recuerdos y preguntas llegan con inquietud violenta,
cuestionamientos que evadía
repercuten todavía.
Hoy mi alma se revela ofendida
por tratar de esconder aquella despedida,
hoy noche como muchas
veo que aún mi ser lucha
contra lo que mi mente escucha,
hoy mi memoria vive condenada
a esconder lo que habita en la nada,
hoy noche con luna de cristal siempre al agonizar
rompe sobre mí y ayudame a olvidar.