¡No importa qué venga
el mal a galope!
Tú, no te detengas
observa aun de miope.
Una fuerte arenga
hará que te arropes,
cuando luz obtengas
tu fe estará al tope
Protégete el cuello
que esperanza gana,
a todo atropello;
Piensa en un mañana
sonríe al destello
¡Convicción te sana!
...s. ....l