Campo
Sin aliento llegó a este vergel
Mi corazón, agitado de tanto ascender
El cansancio humedeció mi piel
Y entre la brisa, tu voz logro reconocer.
Tumbado en el abrazo del pastizal
La sombra de un roble refresca el calor matinal
El arroyo corriendo me invita a soñar
El trinar de las aves me ayuda a olvidar.
El sopor difumina la realidad
Tu mirada seductora y almendrada
Me observa con cariño y calma
Como viva y ardiente llamarada.
Tu nítida y brillante tez morena
Como marco perfecto a tu sonrisa
Y a esos carnosos labios de cereza
Que calman y besan, que confortan y juegan.
Me seduce tu caricia
Tu pierna enredada en la mía
Y tu torso sobre mi pecho
Respirando al ritmo que el viento mece tu cabello.
Mas al final despierto
Sin tu mirada ni tu sonrisa
Sin tu piel junto a la mía
Sin tu cabello ni tus manías.
Solo el campo
Este explorador agotado
Y una nube de deseos
Que algún dia serán recompensados.
By Aldebarán.
®2022.