Es creer en tus ojos
en tu fija mirada
que logra penetrarme
en tu enorme infierno que me quema.
Eres de ser un alma pura que me mira
llevándome suavemente
por caminos nunca antes recorridos
siempre besos, siempre abrazos
siempre un gesto al terminar la noche
siempre viva, siempre directa
eres el cielo que mira mi frente
y aún me sigue acariciando.