Francisco Villa

Carrera

Le pido a la hechicera del camino
poder guardar el ritmo de mi paso,
aún en la llegada del ocaso,
con la perseverancia del beduino

que sabe que el desierto es su destino
y que vivir en viaje no es fracaso.
¿Alguno encadenarse quiere, acaso?
¿Ligarse a un escenario tan mezquino?

Prefiero continuar en la corriente,
y no frenar la marcha en vana espera
de un trance novedoso y diferente.

Yo quiero atravesar el largo puente,
y que la fortuna en esta carrera,
me encuentre peregrinando y de frente.