Tuvimos tiempo para olvidar, tantos días para dejar de pensar y extrañar, rehacer nuestras vidas, creer que esto solo fue casualidad y un error en el destino, pero en cambio seguimos aquí cosechando el amor que sembramos años atrás regando el jardín de los recuerdos con momentos increíbles, ganas de sentir, extrañando las risas juntos, porque contigo aprendí a dejar de hablar cuando en un beso perfecto lo entiendo todo, que un abrazo expresa más amor que mil poemas, que está vida se vive una vez y disfrutar de ti es el placer más grande que la vida me ha regalado.
Tuvimos tiempo para practicar y pensar que decir el día que nos volvamos a ver, como cerrar el ciclo, como terminar con el sentimiento, como hacerle entender al corazón que no podemos querernos más, como vernos una última vez a los ojos, como darnos un último beso, un último abrazo, contarnos que fue de nuestras vidas separados y todas las adversidades que pasamos, pero en cambio al vernos de pronto todo se olvido cuando sentimos el calor de ese abrazo que tanto necesitábamos, ya no cabían las palabras, el odio se convirtió en ternura, las miradas de miedo e incertidumbre se convirtieron en miradas con sueños y esperanzas renovadas, nuestros corazones rotos sanaron de todas las heridas, los reclamos se convirtieron en te amos, las lágrimas de dolor en risas, la tristeza en los ojos se convirtió en luz, nuestra piel reseca volvió a humectarse al sentir el roce de nuestras manos y el fuego de nuestro amor encendió las cenizas que por tanto tiempo se mantuvieron vivas en nuestras almas.
Porque este amor que es tan fuerte nos llego cuando nuestros cielos eran grises, nos llego a cambiar todas las reglas del juego, penetro en nuestros principios cambiando toda la perspectiva de la vida, lo que teníamos roto llego a curarlo, llego a darle paz a nuestras almas que han estado unidas desde vidas pasadas que se amaban y continuamente se buscaban hasta que se encontraron de nuevo, un amor que carece de tiempo que ha vencido los siglos y sigue vivo, sigo preso de tus besos, de hundirme en tu piel, de volar en cada abrazo y hoy que no puedo tocarte siento espinas en mis dedos.
Pase lo que pase yo esperare, aun queda mucha historia que resolver y esperare en el tiempo que no existe entre nosotros, esperare que tu corazón decida que junto a mi todo será posible, que confíes que todo va a estar bien, le he rogado al cielo verte otra vez y después un millón de veces más y mientras eso sucede yo te espero.
Este amor que vivimos es porque cuidamos en nuestra memoria cada caricia recibida, cada beso entregado, cada ternura en la piel, cada te amo, cuidamos cada ceniza de este fuego por si algún día nos encontrábamos de nuevo.