Damián faune ponts

Madre

basta una flor para ebocarte en el silencio profundo y distante.envidriados mis ojos de pensarte te fuiste a vivir una vida más tranquila al más allá...las cosas ,el tiempo ,la monotonía cotidiana no han cambiado solo que tu ya no estás, y eso se hace evidente cada vez más...sendas matinales del gris de tu lápida y el epitafio....ya nunca volverás!! Madre si tú supieras cuánto te hecho de menos,tus manos cálidas con el impetu del amor infinito...basta una flor para recordarte...nunca volveré a mirar tus ojos tiritantes de astros amada madre ni tener tus caricias de amor infinito... descansa mientras me esperes; que muy pronto te alcanzaré...madre te dejo irte de una vez también se que es el tiempo de las cosas,de lo que fue y nunca será jamás...