Vivimos en una granja
llamada capitalismo
donde te ceban, te engordan
y hacen de tí un espejismo
de lo que ha de ser un hombre,
libre, feliz, solidario,
hermano en la madre tierra
de todos seres humanos,
de todos los seres vivos
que entre sus brazos moramos,
un cebadero,una piara,
un criadero de esclavos,
un matadero de almas,
una prisión sin barrotes,
un cementerio sin fosas,
un espejismo en la noche,
una corrida de toros
sin toril ni burladeros,
una tempestad sin lluvia
un corral,un vertedero
donde a quien a no pone huevos
lo meten en el puchero.
Los capos pasan revista,
se llevan los incrementos,
nos echan cuatro pasturas
y dejan los excrementos.