¿SERÁ ESTO UN SONETO?
Cuando de dentro viene el pensamiento
siempre le acompaña un sentimiento
que es la fuente de su nacimiento
y el alimento de su crecimiento.
Los dos merecen reconocimiento,
van de la mano en todo momento
–en la alegría y el padecimiento,
como se dice en el casamiento–.
Más si creéis que uno de ellos me invento
no se os ocurra seguir mi argumento
y escuchad este apercibimiento:
«O en el PENSA miento, o en el SENTI miento»
pues lo habré dicho sin conocimiento
y, si no soy robot, diré «lo siento».