Caminatas de nuevo
en la tarde soleada
horizonte lejano
que abraza la mirada.
Y la brisa me trae
aroma de otra tierra
para mi tan amada
inalcanzable bella.
Un corazón que viaja
en la lluvia y el viento
que se entrega o escapa
en lo dulce de un verso.
Sueño de una caricia
que madura en el tiempo
agua fresca que apuran
unos labios sedientos.
Aquí estoy a tu lado
confundida en tu sombra
soy el tiempo que pasa
murmullo que te nombra.