Quisiera ser río y esquivar las fronteras
Franquear los límites sin visado ni pasaporte
Fluir sin esfuerzo por todos los rincones
Navegar a lomos de la corriente eterna
Tener como techo el firmamento
En compañía de soles y luz de lunas
Explorar caminos nunca transitados
Sin tener conciencia de ningún destino
Besar los labios de las mariposas
Al ser libada como un licor complaciente
Musitarle suavemente a las hojas caídas
Bellas melodías de tiempos lejanos
Invocar a las ninfas de los bosques
Que disipen los peligros con su magia
Fundirme con la tierra en mil abrazos
Al amparo inestimable de su tálamo