Soñaste conmigo dijiste, fueron tan profundos tus sueños que esta prohibido contarlos porque hicimos cosas que no sean inventado.
Cómo te explico que anoche yo también soñé contigo, decirte que desperté entre la desembocadura del río y el mar todo mojado, todo empapado.
Pensar que tú cocina fue el lugar donde empezó a desatarse la furia que estaba escondida, me volví plomero para reparar tu tubería, me introduje en tu fregadero para hacer fluir el agua.
No era tapicero hasta que observe tu mueble y decidí tapizarlo, entre mi rostro postre tus dos cojines y empezar acariciar tan suavemente material.
Lo malo de todo el sueño es que tuve que despertar cuando mi ropa en tu lavadora iba a depositar, no me quedo más que a mano mi ropa lavar y al final mi mente esté poema a mis dedos pudo transmitir.